CIMARRÓN.

     
                                I

 Huye mocosa gacela,
aquí no hay nada.

      Nada

ni en el envés multidimensional de mi pellejo
en el que asombrosamente he descubierto pliegues
resquicios y agujeros negros que no llevan a ninguna parte,
ni entre los cadáveres innobles

cadáveres vergonzantes putrefactando por ahí afuera
mutuamente frotándose de miedo
educados y desangrados
en la Verdad y en la Deslealtad decretadas para con los niños salvajes.

       Hoy ya solo puedo pegarme un tiro
o desear la Gloria Total con pasión inestable.

                                   I I     (A Wilhem Reich)

        Soy un algo en vuestro Registro de Contabilidad  sin sangre
soy un Debe inanimado y muerto
soy un Haber sin zarpas.
        Soy un Rédito a veces inestable
un claro ejemplo de Tipo de Interés.
        Hay veces que soy un Beneficio y una Pérdida al mismo tiempo
todo depende de la Valoración del momento y la fuerza de la Inversión,
soy una Deuda
asustada.
        Hoy soy rentable
por lo que más queráis, dejadme demostrároslo
mirad, tengo todos los papeles en regla.

        Soy en total Depreciación un Vencimiento y una Liquidación
soy una Acción.

        .............y la muchedumbre asesinó a Cristo.

                                 I I I

        Veo

estáis matando a mi hermano.
        Os desprecio y os combato
no es nada personal
conmigo no pudísteis ni podréis nunca,
pero mi hermano de nueve años ya no sabe jugar
sin pedir permiso.
        Y lo que es peor,
ya no se atreve
a reirse del temblor constante de vuestras manos.
        Y todo esto me enfurece.
        Ver el abajo
desde aquí con las manos desolladas
.....he de seguir. Atormentante ésta roca que lentamente me viola
el miedo aetrallador en el estómago otra quemadura en mis dedos
que no se agarran.

         El alcaloide del miedo implosiona en la madre
que no me abraza.

                                         I V


        Saliéndome uñas arañando las pedregosas laderas.


       Os aclaro desde ya
que no soy un viejo poeta acicalado
que me huelen los pies
y que soy intrínsicamente malo.


       Que asco
confieso que mi poesía nace de mi imperiosa necesidad de vomitar
soy un alma curiosa
respirando
introducido en los procesos mentales
y en la mecánica de las ideas de subnormales con coche
que no paran de reir
y reir
bajo esas estrellas sin cabeza que nunca han estado ahí arriba.


       Entrañas rotas
con el sobresalto de esta musica tan apasionada
con carcajada de puerco hediendo a pestazo
agigantado por lava roja y ojos borrasca.
       
      Desafiando mas musculoso y mas terco al Mundo.